Por: Juan José Ramírez
Luego de que el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, se comprometiera a tomar cartas en el asuntos sobre los temas de los migrantes que se encuentran varados en la frontera de Tamaulipas, estos continúan sin ninguna prevención.
En un recorrido realizado por el reportero se pudo constatar cómo la vida de los mas de 2 mil migrantes que se encuentran en el campamento continúan igual sin ninguna protección por la pandemia.
Se puede observas mujeres concinando en los anafres improvisados, niños jugando en los espacios y familias enteras caminando, buscando incluso comida o alguna actividad para conseguir dinero y poder alimentarse.
Y es que la información que han dicho los mismos migrantes, las organizaciones que venía a otorargarles el desayuno; la comida y la cena, ya no cruzan a México por lo que solo serán ellos quienes se tienen que organizar.
«Solo nos traen la cena y es las 6 de la tarde, nosotros nos tenemos que organizar, porque ellos (americanos) ya no vienen e incluso el comerdor no funciona», expesó Maria Lantuver, orginaria de Honduras.
Ante esta situación, los médicos que se encuentran en el lugar de organizaciones altuistas, aseguraron que es un milagro que no se ha dado un caso de Coronavirus en el campamento, sobre todo porque no han segido las reglas de la sana distancia.
Las casas de campaña donde viven siguen estado hacinadas, por lo que no hay una distancia de un metro entre dos, mismas que son habitaldas en algunos casos hasta por 6 personas.
La propuesta por parte de las Autoridades de los 3 órdenes de Gobierno es que al menos el 50 por ciento de los migrantes del campamento sean movidos a donde se ubicaban un Estadio Municipal, donde incluso ya levatantaron carpas e instalaron baños portátiles.
