Por: Juan José Ramírez
Durante su homilia de domingo, celebrando la Segrada Familia, el obispo de la Diócesis de Matamoros, Eugenio Lira Rugacia, reconoció que no hay familia perfecta en todo el mundo, pero que sin embargo esa diferencias son un aliciente para corregir con amor cualquier error.
Al celebrar la misa en la Catederal de Nuestra Señora del Refugio, el obispo aseguró que entre los conflicos familiares no deben de guardarse ningún rencor, muy al contario cualquier diferencia de debe de resolver con amor.
«No hay familia pefecta, sabemos que en cada familia siempre hay conflictos; hay diferencias de decir; de pensar, pero no debemos dejar que todo ello se convierta en rencor que se guarda en el alma», expresó.
Y agregó:
«Y es que este reconcor se convierte en vengaza; en distanciamiento; en un conflicto mayor que divide a las familias, por eso debemos arreglar cual quier conflico con amor; con el diálogo y con la presencia del amor de Dios».
El obispo aseguró que no son tiempos de peleas dentro de una familiar, sobre todo ahora en tiempos tan difíciles donde incluso se tienen ausencias debido a la pandemia, mismas que son irreparables.
Por ello exhortó a los fligreses a que se mantengan unidos como familia, que los padres de familia acerquen a sus hijos a la Iglesia, ya que la palabra de Dios es amor y une en lugar de dividir o crear conflicos entre ellos mismos.
